19 ene 2022

Lo mejor de Momo.

Lo mejor de mamá. Lo mejor de ella misma.

Lo mejor de sí misma. Enfrente de lo peor. Así se lo contó en palabras a la Mamba Flor, cuando ella acudió al rescate de su hermana, como siempre que hay una caída libre.

Que había sido madre para encontrar la luz en el camino. Que en eso depositó ella siempre su fe. En que el amor mayúsculo fuera vía para sacar lo mejor de sí misma. Y que se horroriza cuando sale lo peor, ese lado oscuro de sí misma. 

Envuelta en el edredón. Y en dudas sobre lo que sucede alrededor cuando sus estados de ánimo la delatan. Se esconde, no tiene ganas de hacer. En concreto ni en general, ese verbo, la acción como hastío. De tanto que eras antes capaz de hacer y absorber de una racha de entusiasmo....

Lo peor, ese deterioro de la capacidad de disfrute. Todo lo impregna la melancolía de la confusión, en esos días.

Lo mejor es la remontada, que siempre llega. De uno a otro lado. Así es. Tan complejo como sencillo de relacionar el patrón.

Pero buena especialista de la pirueta mortal. Uno de sus puntos fuertes como bailarina. Momo da muestras de fragilidad, derrumbe, brote psicótico, desajuste. Y sin embargo escribe. Porque su prisma siempre tendrá muchas caras.

Seguir reconociendo a las personas lúcidas de su senda es un medio y un fin. 

Como sabe dar amor, cuando cae siempre los seres amados lo recuerdan, vienen al rescate. 
Es estrepitosa, la manera de pedir ayuda. Pero es su manera. Ya no hay vuelta de hoja a eso. Si te abrió el corazón alguna vez, sabes cómo acercarte. Saber de la caricia necesaria y el sufrimiento que necesita ya descanso. Y no llegarse nunca a dar lo mejor, no querer recordar ese repentino descaro en la cama:

<<"¡¿Quieres que me toque?!" Gritado y susurrado a la vez, tierno pero lascivo.

Y clavar su mirada de sorpresa él en sus ojos y querer beber de su coño en un arrebato. >>

Momo detuvo lo mejor, sabe que él lo habría logrado y aún hoy tiene esa pesadilla y se despierta triste. Porque un día lo sabe y al siguiente no. 

Va alternando sobre quién la cagó más.


"No verá jamás esos ojos clavados"