14 jun 2022

Ice Cube Machine. Primera Parte.

 << - Para asegurarte puedes preguntar: "Can you say me...?"

Con una mirada de picardía de soslayo provocó mi risa al instante, tras de lo cual hubo carcajadas a dúo y agradecimiento irónico por la clase gratis de inglés.>>

Desde ese día. Todo cambió al establecerse la complicidad para el humor, muy parecido y en buena sintonía el de ambos. Eso era una suerte para ella, pues le era difícil encontrar contrarréplica a sus chorradas más frikis en la mayoría de las ocasiones.

<< - ¿Y qué pasaría si te digo que desde hace semanas pienso en comerte la polla...?
- Pues que yo te diría que me masturbo pensando en ello y que llevo un tiempo pensando en cómo, cuándo y dónde te puedo encontrar a solas para comerte el coño yo a ti, pero como no te lo han comido en tu vida, mi amor.
- Vamos al office del salón de eventos, tengo las llaves para cerrar desde dentro...
- ¿Joder, tía, me lees la mente, o qué?
. Es el que no está en uso ni hoy ni mañana y que más cerca me pilla de mi punto de venta, para que sea menos lo que tarde en regresar si hay cualquier cosa...
- No puedo más, ven...>>

 

La interrumpió antes de pronunciar esas últimas cuatro palabras, comiéndole la boca temerariamente, ocultos de las miradas ajenas nada más por la vitrina que separaba la barra de la sala y la puerta del restaurante. Ella ardió inmediatamente por dentro. Por fuera ojos como platos y callada, clavándolos sobre las manos de él que ya tiraban de su voluntad hacia el office contiguo, a escasos tres metros de la puerta de acceso...